Del Nido y Mónica Geller.

No dudo de que la propuesta que presentó el presidente del Sevilla, de que se reparta mejor la pasta de las teles, lo hizo por el bien de su equipo. Pero eso era algo secundario. Si cae, cae. Está bien. Pero lo que le pone al señor Del Nido es ser el centro de atención unos días, el chico del momento, que le entrevisten todos los medios deportivos varias veces al día. Sobre todo entrar por teléfono a las radios que son muchos minutos.

Por eso está tan enfadado de encontrar, en la última reunión (ésta no la organizado él y no fue el anfitrión) abstinencia en buen número e incluso algún desertor que otro. Ve que se le acaba el chollo, que los focos se alejan y la atención mediática volverá a ser la habitual, poca para lo que él desea. Me recuerda al síndrome del anfitrón que sufría Mónica Geller en Friends, cuando intercambian pisos y se le termina lo de ser la anfitriona.

A Del Nido no le bastaba con ser el hospedador, porque al ver que la nueva quedada fue en otra casa que no es la suya y que no avanza la cosa como quiere, ha actuado. Su vicepresidente, J.M. Cruz ha ladrado por él, que estará en su despacho haciendo dos cosas: una, controlando su ira para no explotar demasiado cuando, por última vez, las radios le llamen hoy y mañana por el asunto. Regular su nivel de cabreo cerca del límite, pero sin pasarlo. Y dos: tiene que elegir la frase clave como cuando hace anuncios o quiere montarla como ha hecho en ocasiones. Algo que impacte, con alguna referencia pelín friki para que los jóvenes le sonrían pero sin alejarse de lo campechano tipo obrero, de los seguidores de 40 años o más. Es un arte que viene practicando desde hace un tiempo.

Cine cine cine cine...

''Hay que ir al cine como cuando éramos pequeños, plantarse allí y elegir por el método el cartel que más te mole. Acertarás más que si haces caso a los trailers, críticos, cifras de taquilla...''

Posiblemente cierto. Yo también he cascao ésta frase alguna vez, pero para mí mismo y para los que lo hagan, una cosa:

Recuerda que entonces tampoco eras exigente con el doblaje

Aceptar la realidad.

Hoy quiero hablar de ese rollo que se ha montado respecto a la visita del papa. Pero solamente de un aspecto en concreto, un minigénero del problema que tienen con los homosexuales. A raiz del evento he asistido (por desgracia no pude escapar) a una conversación entre marujas y marujos en el que una señora soltó:

-Los gays no pueden adoptar hijos porque sería un trauma para el niño en el colegio, que los niños son muy crueles.

Voy a responder aquí lo que no hice el otro día porque le hubiera dado cuerda a la vecina un buen rato, y porque ahora calmado mi tono es más educado. Es que es de esas que tiene una forma de hablar que irrita diga lo que diga. Una joya la mujer. A ver, hace quince años podría estar de acuerdo con esa teoría. Yo era adolescente, me creía el más listo del mundo, y es cierto que los niños en el colegio aprovechan cualquier cosa para reirse todos de todos.

Pero amiga, en éstos quince años yo y la sociedad hemos avanzado. Por un lado, yo no soy tan ingenuo y sólo aceptaría una religión católica en la que el papa fuera como el final de la peli de Las sandalias del pescador, a predicar con el ejemplo nenes.

Y lo más importante, hoy en día en cualquier clase de cualquier colegio nos encontramos conque Pepito tiene a su padre en la cárcel, Jaimito y Elenita son unos emos de cuidao y por tanto víctimas de las bormas siendo sus padres hombre y mujer. Bernardito es inmigrante mulato y eso le acarrea rechazo siendo sus padres también de ambos sexos. O mira a Noelita, la está criando su madre soltera, que no se casó que vergüenza ¿eh? Por tanto, ya me dirás si es más, igual o menos preocupante para un chaval que sus padres sean homos, en la sociedad de hoy es sólo un motivo más por el que puedan ser objeto de bromas. Que oiga, a lo mejor lo que habría que hacer en los colegios es fomentar la tolerancia en todos los aspectos, en todos los casos que he citado y los que surjan. Si quiere dígaselo al papa cuando lo tenga delante, hermosa.

Aun más bajo.

Míralos. Todos juntitos de la mano. SER, COPE, Onda Cero, Punto Radio... que monos. Que asco.

Que atajo desgraciados, usándonos de escudo a los oyentes de la forma más vil en la nota que han sacado:

''la pretensión de cobrar por retransmitir los partidos encierra un riesgo de dejar sin fútbol a los oyentes radiofónicos los sábados y domingos''

¿Qué es? ¿Una amenaza? ¿Tanta cantidad es el canon que si les obligan a pagarlo desaparecerán todas las emisoras? Mira, estamos hablando de periodismo deportivo. Si no hubieran caído tan bajo pisoteando la dignidad de la profesión como lo han hecho (Inda, Roncero, Battle...) yo encantado de apoyar la protesta, éste escrito sería muy diferente. Pero hay tanta gentuza en todas las redacciones que los va a secundar su abuela. Además de utilizarnos a nosotros, los oyentes, como escudo, en la nota también hacen gala de otros interesados chantajes morales. Como por ejemplo ésto:

''A diferencia de la televisión, en la radio el espectáculo que tiene lugar en el campo no se sirve al público a través de las imágenes sino que es la versión subjetiva y personal del profesional de la información la que reciben los oyentes''

O sea, reconocen que la objetividad la mandaron al pairo hace años. Así de tontos son. Más manipulación, ahora ya la risión:

''la propuesta de la Liga se realiza en un momento en el que las radios están siendo azotadas por la crisis del sector publicitario''

¿Pero no habíamos quedado que La Cope aumentó un montón su publicidad cuando fichó al grueso de El Carrusel? ¿No ganas siempre todas cuando sale el EGM?

No, en realidad son tan asquerosos que por no pagar un canon que es calderilla, prefieren molestarnos con ésta protesta que meterán muchas veces a lo largo del día en el momento que menos nos esperemos. Ahora supongo que debo añadir que no pertenezco a ningún grupo político que haya sacado el canon de los cojones, ni otra plataforma que se una a ello. Esta entrada es simplemente para quejarme como oyente, individual y jodido de que la mierda de prensa deportiva que tenemos encima nos use para sus lágrimas de cocodrilo.

Cachondeo útil.

Y además internauta. Aunque por aquí me muestro más o menos serio, en plan aprendiz de columnista, tengo internet desde hace años y de todo he consumido. Dentro del entretenimiento chorra, que como en todo hay niveles, están las cosas graciosas de usar y tirar, las tonterías sin sentido que te asombras que alguien crea que tiene gracia, y golpes geniales que pueden ayudar a cualquiera en la vida diaria.

En situaciones comprometidas. Tonto de mí, no aprovecho algunos elementos pero ésto va a cambiar. Lo explico ya: las llamadas al móvil de otras compañías para que te cambies. Por educación, uno soporta un rato. Yo soy (era) de los de aguantar varios minutos en plan ''no, gracias, me vale con el mío. Lo uso poco. Es de tarjeta y controlo mis gastos, eso y mensajes y poco más. Estoy conforme y no voy a cambiarme''. Y él/ella leyendo en su hoja de respuesta tipo las frases para engatusarme. Bueno ya saben, supongo que todos ustedes lo han sufrido. A día de hoy puedo presumir de que nunca he explotado. Pero lo haré. La próxima vez seré implacable. Pero como me imagino que mi reacción sería la de insultar y colgar, he optado por la inteligente ironía que he leído en varios blogs para cazar al cazador, elegiré una trampa de esas y la seguiré a rajatabla. A ver que pasa, si quien me toque me dura mucho. Lo voy a disfrutar, ya lo creo.

Quieren dominar.

Hay varios tipos de personas dentro de los abusones. Los que se conforman con su entorno más cercano, los que quieren controlar todo lo que acontezca a su alrededor, cada detalle, y los que quieren hacerlo a nivel global. Todos conocemos a alguien del primer grupo, por ejemplo la vecina que siempre manda en las reuniones y a ver quien le lleva la contraria. Del segundo grupo, por ejemplo Penélope Cruz, que dicen que necesita aprobar todas las preguntas y todas las fotos de sus entrevistas queriendo hacer el trabajo del periodista y del fotógrafo. Un poco de pena sí que da ver a alguien tan inseguro.

Y elija su dictador del tercer conjunto. Pero dentro del segundo nivel, de los famosillos con ínfulas de amasar a tutiplén, hay gente muy preocupante. No sólo se empeñan en asegurar que lo suyo no sea manipulado, dándoles igual pisar a una o dos personas con las que tiene un trato recíproco, que sería el caso de la actriz española. No, éstos otros lo que quieren es servirse de entramados complejos compuestos por mucha peña para sus fines maléficos, y lo extraño y alarmante es que lo consiguen día sí y día también. En efecto, Mourinho es un caso de tal calibre. Pero hay otros. Sólo hay que poner la tele en horario de prensa rosa, o sea cualquier hora, o abrir un periódico por la editorial. Tienen un púlpito y un sueldazo. Y tienen amigos con influencias. Y un número mayor o menor de ciudadanos que les han creído, y por lo visto todo el compendio de euros que se mueve es suficiente para que duren años y años en su maldito escaparate.

Si sabe usted cómo montar uno de ésas redes tan indestructibles, me avise. Me da igual el tema: una revista de moda de quinientas páginas, en las que la mitad son anuncios y vale 6 euros. ¡Y la gente las compra! Un videojuego hecho con el mínimo y por tanto el precio también lo es, pero nadie con media neurona lo compraría de lo malo que es ¡y va por la octava secuela! Un equipo de Segunda-B que tiene seis directores deportivos de ésto y de lo otro y cuatro vocales que cobran todos más que cualquiera de los jugadores ¡y nadie dice nada! De verdad, a veces me pregunto de dónde sale tanto dinero para tantas tonterías... que triunfan.

Yo también quiero opinar sobre los críticos de cine.

Y sobre los ufólogos, y sobre Shyamalan. Es que dan mucho juego. Son todos ellos seres que generan vidilla (y los tertulianos de los que sí he opinado) Es horrible, la palabra vidilla aplicada a internet. Da vidilla, permitámoslo pues. Pues no. No deberíamos.

Empecemos por tanto con los críticos de cine. Como en tantas cosas, la idea inicial era buena. Orientar al lector que quiera lanzarse a espectador, de cine, desde el escalafón superior del experto. Ya saben, Cahiers du cinema y todo eso. En España Fotogramas cuenta con más de medio siglo de experiencia, se diría que deben saberlas todas. Y sin embargo es una revista que va a peor. En todo, pero los de los críticos es de órdago.

No sé en que momento se permitió el primer disparate, concesión para resultar moderno o lo que más nos gusta, contratación del primer intelectualoide que llena todas sus críticas con palabros intelectualoides. Las otras revistas, más jóvenes en el tiempo, son extremistas. Las que nacieron con aire rancio ahí siguen, con la misma propuesta. A regla fija. Las pequeñas que quieren quedar bien con todos, se pelean como las radios menores por ser la trecera o cuarta en ventas. Y se arriman a lo que haga falta para eso. Y luego está Cinemanía. La que nació como alternativa, haciendo caso al cine español porque sí, y tras una buena etapa alguien decidió estropearlo y empezar a cambiar y cambiar el diseño cada tres meses, copiar descaradamente en mil cosas a Fotogramas y ahora Cinemanía es una frikada comercial (¿y hay algo peor que eso?).

Pero sigue siendo Fotogramas la que reúne la caterva de críticos ridículos. Entre los que por ir contracorriente dan notas que no se la creen ni ellos, sólo para provocar molestias, y los que dije antes, los intelectualoides, y los que ni siquiera ven las películas y se les nota (recurriendo para ello a lo equivalente a leer la contraportada de un libro, ésto es, leer otras críticas) el caso es que los lectores que aun confíen en ellos están desamparados. Sólo son futuras víctimas de unos payasos que por un poco de poder se han acomodado, algunos vendido, a un cachondeo que hace mucho que rebasó los límites de la lógica.

Ir al cine confiando en lo que ésta gente haya escrito es decirle al mundo: mírenme, soy la persona más ingenua del planeta. Querido/a, si quieres ser tan ingenuo y jugar a la ruleta rusa con tu tiempo y dinero, haz como nuestros antepasados. Plantarte en el cine, mirar los carteles y el que te guste más, a esa entras. Acertarás con tus gustos un número de veces mayor que dejarte guiar por los ¿críticos? de ¿cine?

Así están las cosas...

...en el panorama laboral. Unos no quieren trabajar, los controladores aéreos, y les desean obliganr mandándoles el ejército. Otros sí quieren trabajar, los corresponsales bélicos que fueron a El Aaiún, y no les dejan. Los primeros no quieren que se les toque un ápice un sueldo de doscientos mil euros en adelante, que es lo que cobran. Los segundos se juegan la vida.

Y mientras, los refugiados saharauis preguntándose dónde están los del ejército español. A ver quien es el guapo que va y les dice que están en los aeropuertos, controlando a los controladores. Me da que alguien no está tomando decisiones correctas, nadie está donde quiere estar. Seguro que alguno de los periodistas que echaron de El Aaiún está en el hotel de los controladores aéreos, esos supuestamente enfermitos, esperando que lleguen los soldados españoles a comprobar si es verdad que les duele aquí o allá. Sería paradójico cuanto menos. Los caminos del gobierno y de éste país son rarunos de cojones, es curioso que tantas ganas que tenía ese periodista de ver militares y lo va a ver en esas circunstancias, en los halls de los hoteles más molones, acosando controladores.

Lo mismo algún periódico norteafricano les compra esa foto. Berlanga, te fuiste pronto. España no para de ofrecerte películas de las tuyas.

El español es orgulloso

Puede que en breve nos enfrentemos a una prueba, la de a ver cuánto orgullo gastamos. Grecia, Portugal, Irlanda. La espada del rescate económico de Damocles se cierne y no pasa nada que todos se acojan a esa medida. En la lista de números rojos estamos muy cerquita de la diana, para ser los próximos. ¿Lo permitiremos? ¿Nos dejará nuestro orgullo? También hay otra pregunta, si hace falta esa ayuda, pero esa cuestión es lo de menos. Ya veo a los tertulianos saltándosela y yendo a lo importante, al debate que cree polémica.

Porque somos así. Por el que dirán hacemos el gili donde otros, cediendo un poco en cierto momento, alcanzan la felicidad (mayor que la española) poco después. Una comparación deportiva: cualquier país del este sabe cuando tiene que perder en la fase de grupo para que, en los octavos o cuartos librarse de un enfrentamiento con el favorito. Son muy listos en ese aspecto. España, sin embargo, decide ser honesto... para caer en esos primeros cruces y quedar con una cara de circunstancias que ni lo de 'ganador moral' puede compensar. Y ve de lejos como los tramposillos catan medalla. Y se ríen de los españolitos. Bastó una declaración del entrenador de Turquía, por ejemplo, para prender la mecha de la dignidad hispana. Tontoooooos mirad mi trofeo, na na na ná...

Por eso a la hora de debatir si aceptamos ayuda económica para salir de la crisis (que es dinero, money, billetes, euros) por muy mal que estemos veo a muchos diciendo que no. Que aguantaremos, que nosotros somos perfectamente válidos de arreglárnosla sin ayuda de nadie, y nuestros recursos (nuestro ego, en realidad ) nos aleja de mendigar con han hecho otros. Esos otros lo olvidarán pronto y a seguir tras haber resurgido. A ver España como está entonces.

Ella lo merece

Va por delante de mí, andando muy deprisa y hablando por el móvil diciendo a alguien que ya va, que cuando pille un taxi estará allí en cinco minutos. Tiene cosas que yo no, empezando por eso, un sitio concreto al que ir. Yo salgo a pasear sin más, y mira por donde me topo con ella. Es alta, por otras cosas que espío de su conversación (inevitable, de momento en ésta larga recta vamos por el mismo camino) está muy ligada al mundo de la moda. Modelo o curranta en una revista, o algo así. Desde luego modelo podría serlo. Además de muy, muy guapa se le nota haber pasado por ciertos rituales para estar aun mejor, manicura, ropa, el teléfono es cosa fina, sesiones artificiales de rayitos para estar bien morena, o quien sabe si su moreno es natural de tumbarse y esperar al lorenzo el pasado verano. En cuyo caso lo ha conservado intacto desde entonces.

Pero no la imagino con tanta paciencia, de verdad que parece estresada mientras busca y enciende un pito -cigarro- que no funciona el mechero a la primera y parece que vaya por la cien, se aparta el pelo que le molesta para la acción, oh si, el mundo contra tí que estrés. La envidio por el dinero que es posible maneje y pienso lo que todo varón pensaría. Pero unos segundos después me da tiempo a pensar otras cosas. Porque la oigo otras cosas, en su forma de hablar megapija que empiezo a preguntarme que diablos pinta alguien así en mi barrio, donde es milagro verlas con ese aspecto solas, vestidas como son las diez de la mañana con un trapo que dice pasarela, pero pasarela en el momento de presentarlo, no con los fondos y arreglos que luego sirven en las tiendas para las mortales.

Y como aquí no hay pasarela, destaca la chica. Creo que en los últimos, pongamos, diez años he aprendido a base de observar a distinguir entre modelos o aspirantes a, y entre chonis urbanas que están gastando el dinero de otros, bien papi y mami, bien chorbo bakala o como se denomine ahora al noviete chulesco. Lo hacen para parecerse a las primeras sin conseguirlo, pues la clase no se compra. Mi amiga tiene clase, pero aparte de lo pijo de su hablar, es de esas que va enfadada por el mundo. Mirándolo por encima del hombro. Consciente de su superioridad. De esas que, en caso de ser modelo, desfila más seria que si la acabaran de decir que se ha muerto su abuela, porque a profesional no la gana nadie.

Por eso no puedo tomar estima a ésta chica, porque se cree que está en Nueva York y no está en Nueva York.